Las monedas virtuales podrían ser la pieza que faltaba para hacer competitivos los modelos de negocio circulares.
Existe una gran cantidad de conocimientos teóricos sobre las ventajas de las nuevas tecnologías disruptivas emergentes, como el blockchain, pero es mucho más difícil demostrar los beneficios reales en la práctica. En los próximos meses, un consorcio impulsado por Circle Economy, y en el que participan entidades como Sustainable Finance Lab, Nederland Circulair!, Rabobank o ING, reunirá conocimiento, tecnología y expertos para probar las posibilidades del blockchain para modelos circulares de pago por uso en una Comunidad de Práctica.
Esta Comunidad de Práctica (CoP, por sus siglas en inglés) explorará cómo la tecnología blockchain puede facilitar modelos circulares de pago por uso. La CoP realizará una prueba piloto con Bundles, una compañía circular que ofrece lavadoras de pago por uso, en una plataforma blockchain desarrollada por Rabobank.
El acceso a ciertos servicios en lugar de la propiedad (en este caso, de las lavadoras) se considera uno de los posibles impulsores de la transición hacia una economía circular. Los modelos de pago por uso están facilitando este cambio y son vistos como una herramienta importante para poner en práctica una economía circular. En los modelos de pago por uso, los clientes pagan por el uso de un producto en lugar de poseerlo. Este modelo crea incentivos para que los productos duren, estimula a las cadenas de valor para que trabajen juntos y asigna más responsabilidad a los productores para la recogida, el tratamiento y la reutilización de los productos.